La vida es...

¿Qué es la vida?
-La vida es... quizás, una representación en la que tú eres el protagonista y alguien, en alguna parte, está viéndote comiendo palomitas.
-La vida es... a veces, como una cámara de tortura, de la que salimos muertos.
-La vida es... como un sueño, del que uno se despierta un día y se da cuenta de que ya no podrá volver a domir nunca más.
-La vida es... como una carrera. Hay gente que la hace más deprisa, otros tardan muchísimo. Lo único que sabemos es que al final, llegaremos a nuestra meta (la muerte).
-La vida es... una amiga, que está siempre contigo y que te ayuda a crecer y te enseña muchas cosas, hasta que un día ya sabes tanto como ella y te abandona.
-La vida es... como un espejo. Cuando te ves reflejado no solo estás tú, sino que estan todos esos momentos en los que la odiaste, en los que la amaste, en los que fuiste feliz o desgraciado.
-La vida es... una búsqueda. Avanzas y avanzas hasta que encuentras lo que habías perdido.
-La vida es... como un precioso jarrón chino. Es hermoso a su manera, no tiene precio y si no lo cuidas se romperá en pedazos.
-La vida es... indescriptible.

¿Qué la hace tan especial? Que sólo te dan una, que no puedes ir y cambiarla y que, para bien o para mal, una vez que te la dan ya no hay marcha atrás.

¿Por qué entonces hay gente que la malgasta? ¿Por qué entonces no aprovechamos el momento? ¿Por qué pensamos "ya se lo diré la próxima vez" o "otro día vamos"? Porque pensamos que siempre tendremos un mañana.
Un día, después de pasar muchos mañana, miras atrás y te das cuenta de que no has hecho nada en tu vida. Que la has malgastado siendo egoísta e hipócrita, creyendo que la vida te ayudará y estará contigo después, cuando ya no te quede nadie.

Pues te tengo una mala noticia: has malgastado tu vida. Y ya no puedes volver atrás para arreglarla. No importa lo que ahora trates de hacer, no te queda bastante tiempo. Pero no todo es malo. Hay algo que SI has hecho bien: enseñarme cómo NO debo vivir la vida.

Esta entrada te la dedico a ti que, aunque sé que nunca la vas a leer, si me pongo en tu lugar me doy cuenta de que, aunque les hagas daño a los demás, tú te llevarás siempre la peor parte.

Gracias. Me has ayudado mucho a ser como soy ahora. Me has hecho fuerte y decidida, y me has ayudado a tener una vida mucho mejor que la tuya. No es mucho, pero espero que el resto de tiempo que te quede en esta cámara de torturas te sea más o menos breve.